La prevención de riesgos laborales en la limpieza industrial con agua a presión tiene la finalidad de mejorar la seguridad y salud de los trabajadores en este tipo de intervenciones.
Para obtener un resultado optimo, es imprescindible, que todas las partes implicadas, se responsabilicen en cumplir debidamente con las disposiciones de seguridad y salud definidas en los procedimientos de trabajo, en cuanto a la ejecución y uso de maquinaría y herramienta necesaria.
El procedimiento de Coordinación de Actividad Empresarial, conocido como CAE, surge para verificar que tanto los trabajadores como las empresas implicadas cumplen con los requisitos legales exigidos y es una pieza clave para garantizar un correcto resultado.
Señalar que, una adecuada planificación es indispensable para que la calidad y la seguridad y salud se cumplan a la hora de realizar cualquier trabajo.
Identificación y evaluación de riesgos en limpieza industrial con agua a presión
El primer paso consistirá en la identificación de los riesgos presentes en la limpieza industrial con agua a presión que puedan afectar a las personas implicadas. Remarcar que estos riesgos pueden variar en función del entorno de trabajo.
Una vez identificados los riegos, se evaluarán mediante la evaluación de riesgos, documento que contrastando la probabilidad y la severidad del riesgo, obtiene como resultado la gravedad del mismo, pudiendo ser: Leve, Moderado, Grave y muy Grave.
Según la gravedad de los riesgos analizados, se planificarán las diversas acciones que tendrán como resultado, siempre que sea posible, eliminar el riesgo y si no es posible, minimizarlo o controlarlo.
Procedimiento de seguridad en limpieza industrial con agua a presión
Una vez realizada la evaluación de riesgos, la coordinación de actividad empresarial y disponer del personal con la formación necesaria y autorizado, el procedimiento general de actuación para realizar una limpieza con agua industrial será el siguiente:
- Análisis del entorno de trabajo, si se identifica algún riesgo no evaluado anteriormente, se avisará a los responsables para que se tomen las medidas oportunas.
- Señalizar y balizar la zona de trabajo para que ninguna persona ajena a la misma resulte dañada.
- Revisar los equipos de trabajo y los equipos de protección individual (EPIs) para determinar su correcto estado.
- Iniciar la limpieza planificada siguiendo los procedimientos de empresa.
- Velar durante el desarrollo de la limpieza que no cambien las condiciones de trabajo o que algún equipo de trabajo no funcione de forma apropiada
- Una vez realizado el trabajo recoger equipos, señalización, balizado y residuos que se hayan podido generar para dejar el entorno libre de obstáculos y tal y como estaba.
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